miércoles, 27 de enero de 2016

El que tenga oídos que oiga

“El que tenga oídos para oír, que oiga”. Los relatos de los evangelistas son de fuertes contrastes, pero de una progresión en línea. Cada una de las vivencias de Jesús que narra el evangelio se hace de historias sencillas que sirven para comunicar algo espiritual aunque misterioso. En estas historias contadas como parábolas, son las dificultades y aparentes fracasos de Jesús ante la indiferencia de unos y contradicciones de otros, que lleva a acuñar la frase, “el que tenga oídos para oír, que oiga”. 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario